Robos
Toda apertura en la fachada constituye un punto débil del edificio. De hecho, los ladrones tienden a entrar en casa a través de las ventanas. ¿Por qué? Por que es el método más rápido. Las estadísticas policiales muestran que, la mayoría de las veces, si el ladrón no consigue entrar en la casa en cinco minutos, se da por vencido. Por eso, un 90 por ciento de los robos se pueden evitar equipando a las ventanas con modernos dispositivos de seguridad.
74 % de las intrusiones son forzando el marco
10 segundos es el tiempo que necesita un ladrón para forzar una ventana sin bulones
82 % de los robos en un domicilio su producen a través de las ventanas y las balconeras
Herrajes de seguridad
Bulones tipo champiñón: un elemento estándar.
Los bulones normales se pueden forzar en diez segundos, los bulones tipo champiñón lo impiden: Gracias a su forma particular, el cabezal del bulón tipo champiñón se introduce en la cavidad de la parte maciza del cierre de seguridad que se encuentra en el marco, bloqueando la ventana adicionalmente. Esto hace que sea prácticamente imposible forzar la hoja. En Finstral, todas las ventanas están equipadas de serie siempre con cuatro puntos de cierre de seguridad con bulones tipo champiñón.
Manilla protección antirrobo
Con llave y protección antitaladro
Las manillas con llave bloquean todo el mecanismo de cierre. En caso de un intento de forzar la ventana, el bulón tipo champiñón permanece bien anclado en los puntos de cierre de seguridad impidiendo el apalancamiento de la hoja, ya que la manilla con llave bloquea el mecanismo.
Sensor de ventana
Asistencia integrada.
Los sensores magnéticos integrados vigilan el estado de apertura de las ventanas y comunican al sistema de alarma si las ventanas están abiertas, en posición abatible o cerradas. De este modo, nunca se dejará las ventanas abiertas, ni dejará entrar a los ladrones.
Vidrio laminado de seguridad
Se fragmenta, pero no se rompe.
Nuestro vidrio laminado de seguridad Multiprotect está compuesto por dos vidrios adheridos entre ellos mediante una lámina muy resistente al desgarro. De este modo, si intentasen entrar a robar, podrían fragmentarlo, pero no se rompería del todo puesto que la lámina mantiene unidos los fragmentos, previniendo así posibles lesiones. Cuanto más gruesa es la lámina, mayor es la protección antirrobo.
Una ventana no protegida de forma adecuada se puede abrir en diez segundos con un simple destornillador. Una ventana equipada con un herraje de seguridad con 4 puntos de cierre, no. Con FIN-Window, los 4 puntos de cierre de seguridad con bulones tipo champiñón forman parte del equipamiento estándar. Este nivel de seguridad es el equipamiento mínimo que le aconsejamos para sus ventanas.